Durante la edición 2021 de la Vacation Rental World Summit, el proveedor de datos de alquileres a corto plazo AirDNA presentó un estudio sobre el mercado europeo, con especial atención en Francia. Compararemos aquí los datos con lo que hemos visto en EE. UU. En resumen: Al igual que EE. UU., Europa ha batido su récord anterior de ocupación. Sin embargo, mientras que en EE. UU. se vienen batiendo récords desde enero, Europa también ha superado las cifras de 2019 en julio y agosto. Europa ha sido súper estacional. En Francia, París ha arrastrado drásticamente hacia abajo las cifras generales de demanda francesa, mientras que las regiones rurales han tenido buenos resultados.
En agosto de 2021, la demanda de alquileres a corto plazo en Norteamérica se volvió negativa. Desde enero de 2021, la demanda en EE. UU. se ha recuperado notablemente, mucho más que en Canadá y México. De hecho, la demanda en EE. UU. ha sido mayormente positiva en comparación con las cifras de 2019.
En Europa, en general, la demanda de alquileres a corto plazo en 2021 todavía está por debajo de las cifras de 2019.
En EE. UU., la ocupación de alquileres a corto plazo superó el umbral del 70% en junio de 2021, por primera vez en la historia, alcanzando el 70.2%. Esto fue un 20% más que en junio de 2019, en aquellos lejanos tiempos prepandémicos, según AirDNA.
En Europa, también se alcanzó por primera vez una tasa de ocupación del 70%, en agosto de 2021.
El gran contraste entre la situación europea y estadounidense es que la ocupación ha venido batiendo récords en EE. UU., mes tras mes, desde enero de 2021. En Europa, los niveles de ocupación comparables a los de 2019 solo se alcanzaron en julio.
Esto significa que julio y agosto fueron excepcionales en Europa, mientras que los meses previos fueron muy flojos. Al igual que en 2020, Europa ha tenido un verano súper estacional, mientras que en EE. UU. han disfrutado de un año más regular.
El informe de AirDNA también se centró en Francia, ya que VRWS 2021 tuvo lugar en la ciudad francesa de Annecy. Aunque tus propiedades no estén ubicadas en Francia, puedes obtener aprendizajes interesantes comparando tu región y país con este caso de estudio. El mapa anterior compara la demanda de alquiler a corto plazo en las regiones de Francia, en julio de 2021 frente a julio de 2019. Algunos datos destacados:
- Grandes ciudades como París y Marsella restan demanda a sus respectivas regiones (un asombroso -49,5% en Ile-de France para París y solo +0,9% en Provenza Alpes Costa Azul para Marsella). Esta última región se vio favorecida por la demanda de la Riviera Francesa y de los Alpes del Sur.
- Las regiones más verdes como Borgoña y Loira crecieron más, con respectivamente +19,2% y +17,6% más demanda.
Al igual que en EE. UU., el número total de anuncios en Francia ha ido aumentando desde comienzos de 2021. De hecho, en julio de 2021, Francia alcanzó una cifra histórica, acercándose a 900,000 anuncios.
Puedes observar cierta estacionalidad en el número de anuncios, con más anuncios en verano. Curiosamente, la rotación fue mayor en 2019 que en 2020. El verdadero problema en 2020 fue un menor número de nuevos anuncios.
Thibault Masson es un experto de referencia en gestión de ingresos de alquileres vacacionales y estrategias de precios dinámicos. Como responsable de marketing de producto en PriceLabs y fundador de Rental Scale-Up, Thibault ayuda a anfitriones y gestores de propiedades con análisis prácticos y soluciones basadas en datos. Con más de una década gestionando alquileres de lujo en Bali y San Bartolomé, es un ponente muy solicitado y creador de contenido prolífico, capaz de simplificar temas complejos para audiencias globales.
Related Articles:
Cómo la IA, la sensibilidad al precio y las regulaciones están influyendo en la gestión de propiedades: Perspectivas clave de VRWS 2024
Impacto de la Copa Mundial de Rugby 2023 en los precios y reservas de Airbnb
Encontrar la mejor herramienta de precios dinámicos para alquileres vacacionales es fácil
Tendencias de alquileres vacacionales en EE. UU. en 2022: la paradoja de un año de “nueva normalidad” que puso fin a algunos números récord